De acuerdo al diccionario de la Real Academia de la Lengua Española la masturbación es el conjunto de acciones llevadas a cabo para la estimulación de los los órganos genitales y zonas erógenas con el objeto de lograr placer sexual.
A partir de esta definifición podemos destacar algunos puntos como que no se hace referencia en exclusiva a los organos genítales, de forma que la estimulación de otras zonas erógenas también sería considerada masturbación al conducir hacia el placer sexual.
Debemos recordar que los organos sexuales apenas son una pequeña parte de las zonas erógenas que existen en nuestro cuerpo y sería una lástima no tenerlas en cuenta.
También es interesante hacer notar como la masturbación puede realizarse de forma individual o en pareja, es decir, una masturbación mutua que enriquece las relaciones sexuales.
Algunos mitos sobre la masturbación
Por desgracia resulta necesario desterrar algunos mitos que han crecido entre la población durante decadas pasadas y que mucha gente considera verdades absolutas.
Entre algunas de las creencias más extendidas figuran que la masturbación provoque acne, que las mujeres no se masturban, o que se trata de una anomalia sexual.
En realidad la masturbación es una práctica muy extendida que mejora el conocimiento sexual acerca de uno mismo, lo cual resulta de gran valor para disfrutar de unas relaciones sexuales óptimas en pareja. A través de la masturbación podemos descubrir que nos gusta o que no, y transmitírselo a nuestra pareja.
Técnicas de masturbación
Acariciarse y frotar nuestras zonas erógenas es la técnica más común de masturbación. En el caso masculino el hombre suele centrarse en la estimulación del pene, mientras en la mujer es más común que comience estimulando otras zonas como los senos.
En la masturbación masculina centrada en el pene la estimulación consiste en la extensión del cuerpo del pene hacia arriba y abajo, al principio de forma suave y aumentando la cadencia progresivamente.
Para la masturbación femenina, los movimientos son mucho más suaves y lentos, centrándose en la vulva, clítoris y monte de venus. La estimulación puede realizarse a través de la presión del monte de venus mientras la otra mano pasa de los labios a la parte exterior de la vagina y al clitoris.
El uso de objetos suele ser algo común en la masturbación, y de igual forma la fantasía juega un papel muy importante para evadirnos de los problemas y aumentar el placer sexual.
asi que olvidemos los mitos tontos sobre la masturbacion y vivamos una vida sexual plena.
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